Errores comunes al maquillarse: consejos simples para evitarlos

El maquillaje es una herramienta de belleza que nos permite realzar nuestros rasgos y lucir radiantes. Sin embargo, a veces podemos cometer errores que arruinan por completo nuestro look. Desde difuminar mal la base, hasta exagerar en la aplicación de rubor, hay una serie de errores comunes que todas hemos cometido en algún momento.

En este artículo, te presentaremos una lista de errores de maquillaje comunes y te daremos consejos sencillos para evitarlos. ¡Así que prepárate para lucir impecable en cualquier ocasión!

1. No preparar la piel antes de maquillarse

Uno de los errores más comunes es no preparar adecuadamente la piel antes de aplicar el maquillaje. Muchas veces nos saltamos el paso de la limpieza facial y directamente aplicamos los productos. Esto puede resultar en una base poco uniforme y una apariencia opaca.

Para evitar este error, es importante tomar el tiempo necesario para limpiar e hidratar la piel antes de maquillarte. Lava tu rostro con un limpiador suave, aplica una crema hidratante adecuada para tu tipo de piel y espera unos minutos antes de empezar a maquillarte. Esto ayudará a que los productos se adhieran mejor y tu piel luzca más radiante.

2. Usar la base de maquillaje incorrecta

¡La elección de la base es crucial! Usar una base de maquillaje que no sea adecuada para tu tipo de piel puede arruinar por completo tu look. Si tienes la piel seca, es importante elegir una base hidratante. Si tienes la piel grasa, busca una base oil-free que controle los brillos. Si tienes la piel mixta, opta por una base ligera y de larga duración.

Además, asegúrate de elegir el tono correcto para tu piel. No cometas el error de aplicar una base demasiado clara o demasiado oscura, ya que esto creará una línea divisoria poco favorecedora en el cuello.

Si no estás segura de cuál es la base adecuada para ti, no dudes en pedir ayuda a un/a profesional en una tienda de cosméticos. Ellos te podrán asesorar y ayudarte a encontrar el producto perfecto para tu piel.

3. Aplicar demasiado polvo en el rostro

El polvo es una herramienta importante para sellar el maquillaje y controlar los brillos. Sin embargo, es muy común cometer el error de aplicar demasiado polvo en el rostro, lo que puede resultar en un acabado empolvado y poco natural.

Para evitar este problema, asegúrate de usar una brocha grande y suave para aplicar el polvo con movimientos circulares. En lugar de aplicar una gran cantidad de polvo de una sola vez, es mejor aplicar capas finas y construir el producto gradualmente. Además, concentra la aplicación en las zonas más propensas a los brillos, como la frente, la nariz y la barbilla.

Recuerda que el objetivo del polvo es sellar el maquillaje y controlar los brillos, no crear una capa de polvillo en tu rostro.

4. Difuminar mal el rubor

El rubor es una herramienta que nos permite darle vida a nuestro rostro y conseguir un aspecto saludable. Sin embargo, difuminar mal el rubor puede resultar en un aspecto poco natural y hasta incluso en la aparición de manchas en las mejillas.

Para evitar este error, es importante elegir el tono adecuado de rubor para tu tono de piel. Evita aplicar el rubor directamente en las mejillas sin difuminarlo, ya que esto puede crear una apariencia poco favorecedora y poco natural.

Para difuminar bien el rubor, utiliza una brocha adecuada y aplica el producto en pequeños toques en las mejillas. Luego, difumina el producto con movimientos circulares hacia las sienes. Recuerda que menos es más, así que es mejor empezar con una pequeña cantidad de rubor y construir el color gradualmente.

5. No utilizar una brocha adecuada para aplicar la sombra de ojos

La sombra de ojos es una herramienta fundamental para crear una mirada impresionante. Sin embargo, no utilizar una brocha adecuada para aplicarla puede arruinar por completo tu look.

Evita utilizar los aplicadores de sombra en forma de esponja que vienen con algunas paletas de sombras. Estos aplicadores suelen ser poco precisos y no permiten una aplicación uniforme de la sombra.

En su lugar, invierte en un buen set de brochas de maquillaje para sombras de ojos. Una brocha plana te permitirá aplicar la sombra en el párpado móvil, una brocha difuminadora te ayudará a difuminar los colores y una brocha precisa te permitirá aplicar sombra en el área del pliegue del ojo. Con el uso de las brochas adecuadas, podrás crear looks de ojos impresionantes y profesionales.

6. Aplicar el delineador de labios de forma incorrecta

El delineador de labios es un producto que nos permite definir la forma de nuestros labios y hacer que el lápiz labial dure más tiempo. Sin embargo, aplicarlo de forma incorrecta puede resultar en una línea poco precisa y poco favorecedora.

El error más común al aplicar el delineador de labios es hacer una línea demasiado gruesa o muy por fuera del contorno natural de los labios. Para evitar esto, es importante utilizar un delineador que sea del mismo tono o ligeramente más claro que el lápiz labial.

Empieza aplicando el delineador en el arco de cupido, el punto más alto del labio superior. Luego, traza una línea fina siguiendo el contorno natural de los labios. Si deseas aumentar el volumen de tus labios, puedes hacerlo aplicando el delineador ligeramente por fuera del contorno natural de los labios, pero asegúrate de hacerlo de forma sutil y precisa.

7. No utilizar un primer de ojos

Si eres fanática de los looks de ojos intensos y duraderos, no puedes olvidar utilizar un primer de ojos. El primer de ojos es un producto que se aplica antes de la sombra de ojos para aumentar su duración, intensificar los colores y prevenir que se acumule en los pliegues del párpado.

Si no utilizas un primer de ojos, es probable que tu sombra se desvanezca rápidamente y pierda intensidad a lo largo del día. Además, es posible que se acumule en los pliegues del párpado, creando un look poco estético.

Aplica una pequeña cantidad de primer de ojos en el párpado móvil y difumina bien el producto. Luego, aplica la sombra de ojos como de costumbre y verás cómo tus looks de ojos duran mucho más tiempo y se ven más intensos.

8. No prestar atención a las cejas

Las cejas son el marco de nuestros ojos y pueden hacer una gran diferencia en nuestro look. No prestar atención a las cejas y dejarlas descuidadas puede arruinar por completo nuestro maquillaje.

Es importante definir y dar forma a las cejas para enmarcar el rostro y resaltar nuestras características. Si no estás segura de cómo dar forma a tus cejas, considera ir a un profesional para que te las depile y te enseñe cómo mantenerlas en casa.

Además de dar forma, es importante rellenar las cejas para crear un aspecto más definido. Utiliza un lápiz o polvo para cejas del mismo tono que tu pelo y rellena los espacios vacíos con pequeños trazos suaves. Recuerda que menos es más, así que aplica el producto de forma sutil y difumina bien para un aspecto natural.

9. No retirar correctamente el maquillaje

El último error, pero no menos importante, es no retirar correctamente el maquillaje al final del día. Dormir con el maquillaje puede obstruir los poros, causar irritaciones y empeorar el acné.

Para evitar este error, es importante retirar adecuadamente el maquillaje antes de dormir. Utiliza un desmaquillante suave y asegúrate de remover completamente todo el maquillaje, incluso el rímel y el delineador a prueba de agua.

Después de retirar el maquillaje, lava tu rostro con un limpiador suave y aplica una crema hidratante para restaurar la hidratación de la piel. También puedes aprovechar y aplicar una mascarilla facial para darle un impulso extra de cuidado a tu piel.

Conclusión

Evitar estos errores comunes de maquillaje puede marcar la diferencia entre lucir impecable y lucir descuidada. Desde preparar adecuadamente la piel, hasta difuminar bien el rubor y utilizar las brochas adecuadas, hay una serie de consejos y trucos simples que pueden ayudarte a evitar estos errores y lograr un maquillaje impecable.

Recuerda que el maquillaje es una forma de expresión personal y de resaltar nuestra belleza natural. No tengas miedo de experimentar y jugar con diferentes colores y técnicas. A medida que practiques y te familiarices con tu técnica, te sentirás más segura y estarás lista para lucir radiante en cualquier ocasión.